mi primer fic-un comienzo!!!

Ola wueno pos aki les va mi historia
Yo era humana, pero vivía incompleta, sentía que algo me faltaba y decidí viajar... viajar para poder encontrar lo que buscaba... ¡¡¡y lo encontré!!!
Era de noche regresaba de la casa de Katherine, era un lugar muy frio situado al norte de Alaska. Había ido allí para ver la belleza de la nieve, la cual me encantaba desde que tenía uso de razón ,y tambien para visitar a Katherine (una amiga de la infancia)wueno ya no la recuerdo, a lo que iba; era oscuro y un delicioso aroma me distrajo, al otro lado de la calleja pude ver a un joven, era un mozo de extraña belleza que me miraba con gran inquietud... como si tratara de controlarse... camine hacia el mordiéndome el labio y apretándome las manos con tanta fuerza que casi me las saco de su lugar; él me siguió mirando con un miedo tangible a varios kilómetros, y me dijo:"hola bella" y su voz sonaba como el arpa más fina con las más caras cuerdas de oro, era tan perfecta su voz que dude que me hablara a mí!!! ¿Como sabia mi nombre? ¿Que quería de mi?...
- lo conozco joven? -respondí con voz entrecortada casi un susurro, pero él la escucho-
-no, pero yo te anhelo más que a nada en el mundo-dijo sonriendo y sus dientes perfectos relucieron en la oscura noche.
-¿perdone el joven se llama?-parecía una tonta hablando con un desconocido, recordé la historia de la caperucita roja y sonreí.
-Edward-dijo él y me miro con tanta intensidad que tuve que volver la mirada hacia atrás como buscando algo que no existía.
-encantada-farfulle
-no lo estés-me dijo él.
en ese momento se acercó más a mi e inhaló el aire que acaba de espirar susurró un "delicioso" que me dejó muda, su sonrisa era ahora una mueca, una desgarradora mueca de dolor y esos ojos de un granate más fuerte que la sangre...tan vivo... tan rojo, me atraían
-¿que desea de mi joven?-pregunte mirando hacia el suelo fingiendo buscar algo
-no aun nada...-me dijo riendo-¿que es lo que buscas?
-ehmm...mi anillo-respondiendo inventando algo.
Tenía un anillo, lo había perdido hacia unos tres dias pero recordaba haberlo puesto en el cajón de la mesita de noche de la habitación del hotel.
-este?-y abrió su mano mostrándome mi anillo
-muchas gracias lo ha encontrado-dije muy agradecida
-no-dijo avergonzado mirando al suelo-lo he cogido yo
-¿como?
-te amo-me dijo el atrayéndome hacia su cuerpo, era frio y duro como el mármol-y no puedo contenerme más no te quiero hacer daño pero ¡¡¡necesito tu sangre!!!
-¿perdón? ¿Mi sangre?-respondí un tanto asustada
-no puedo-gruño él y me arrojó hacia la berma.
Caí sentada y no me hice nada, él me miró y en un instante estaba a mi lado ayudándome a parar, su cara reflejaba dolor y culpa por algo que había hecho o estaba por hacer...
-Edward...-susurré-¡¡¡tranquilícese!!! Ahora dígame para qué necesita mi sangre
La voz me salió mejor de lo que esperaba, él me quedó mirando, ladeó la cabeza y sonrió, una sonrisa mágica, se sentó en el piso y me invitó a sentarme tambien traía una falda larga asi que no había problema, lo hice.
-bella... ¿crees en las historias de miedo?-susurró-me refiero a todas esa historias antiguas, esos mitos y todo eso
-si- dije estaba segura de mi respuesta yo estaba maldita pues la mala suerte me reinaba siempre asi que no dude en contestar.
-¿cual es la que más te asusta?-me preguntó serio aún.
-pues la de los hombres lobo-dije con un escalofrió, el piso estaba helado.
-¿y la de los vampiros?-susurró mirándome con miedo
-no mucho-dije- los vampiros han sido humanos sólo que han sido víctimas de una accidente según sé su sangre les ha parecido tan deliciosa a otros vampiros que éstos los mordieron y se transformaron en vampiros, fueron víctimas no les temo, no son malos solo no lo pueden evitar, creo que… ¡no olvídelo!
-argh!!!-Dijo él y luego me miró-¡¡¡es tan frustrante todo esto!!!
-que?-dije sorprendida
-¿que piensas?-me dijo muy enojado aún
-en la caperucita roja-dije seriamente
-¿En la caperucita roja?-dijo él muy sorprendido-¿por qué?
-bueno es que ella le habló a un desconocido, el lobo, y bueno eso no se hace y ahora yo lo hago-sonreí-es parte de mi estupidez supongo.
Se río con ganas esta vez y se levantó del suelo, seguía riéndose y de repente se puso serio.
-que es lo que buscas?-me dijo muy intensidad
-me busco a mi misma-dije mirándolo con toda la intensidad que pude-yo nací incompleta, lo supe desde pequeña asi que cuando cumple 13 años me escape de mi hogar y empecé a viajar, vi tanto que me olvidé del pasado y me concentré en mi meta; encontrar mi pieza perdida...pero tal vez lo que busque no existe y esté destinada a vivir incompleta...o tal vez nací para ser algo incompleto…-mi voz se ahogo de repente.
-¡¡bella mírame, descubre que soy por favor y aléjate de mí!!!-Susurró al tomarme el rostro con sus manos heladas-¡¡¡te amo pero no estoy dispuesto a matarte!!!
-¿Edward que es usted?-lo mire con compasión y ternura
-no quieres saberlo-repuso él cerrando los ojos
-¡es usted muy extraño!
-¿como asi?-dijo muy receloso
-primero me dice que averigüe qué es y luego que no debería saberlo es raro en verdad inclusive para mí que nací incompleta
-¿de que color son mis ojos bella?
-granate.-dije con amor, ese ser me empezaba a encantar y aunque se debatía entre matarme o no me enamore de él.
-como que?-me dijo ausente.
-como las cortinas de la casa del alcalde- sonreí-como los pétalos de una rosa joven, como la sangre...
Y entonces caí en la cuenta...y los vampiros? me había preguntado... los ojos granate ,querer beber mi sangre...
-eres un vampiro!!!-susurré asustada
Un vampiro, estaba enamorándome de una vampiro, aquello era algo irracional, aquello estaba mal, era antihumano, no era natural y sin embargo el saber la verdad de él me hizo sentí como protegida, como feliz …
- Lo siento-dijo él muy apenado-no debí decirte esto
- No se preocupe Edward le juro por mi vida o lo que usted está a punto de quitarme que me llevaré el secreto a la tumba con una condición…
- ¿Cual?- Dijo extrañamente curioso
- Quiero si no es muxa molestia que no me mate hoy… y que nos encontremos aquí todas las noches para saber más de usted antes de acabar con mi vida-dije timidamente.
- Que fácil discutes el tema de tu muerte-dijo divertido-creí que saldrías gritando
- ¿Porque lo haría?
- ¡¡¡Porque soy UN VAMPIRO!!!- me encaro y gruñó
Sonreí se veía realmente aterrador pero sabía que no me haría nada al menos hoy.